¿Quién es Martín Castillo Cano?

Martín Castillo Cano trabajaba en la Escuela de Artes Plásticas de la UN, en el Bloque Cinco, Sede CAN, en tareas de restauración y reparación de aparatos eléctricos dañados en acción por profesores y estudiantes. Al mismo tiempo, realizaba sus propias actividades en un pequeño taller que construyó sobre el rincón derecho del primer piso, detrás de los caballetes y las cajas de artefactos eléctricos desguazados. Cierta tarde, luego de significante tropel en el campus, cuyas neblinas tóxicas alcanzaron varios kilómetros a la redonda -acaso animadas por las aspas de los helicópteros-, presenció lo que nunca se habría soñado: tras cerrar la sala de arriba, donde ocurren las Tecnopoéticas, llena de computadores y aparatos eléctricos, notó que cierta lucecita parpadeaba a sus espaldas. Al darse vuelta, notó que uno de los viejos retroproyectores se hallaba encendido, y que algo se apagaba sobre el muro contiguo. Entró a toda prisa con intención de apagar el retroproyector, pero se sorprendió al ver que ni siquiera estaba conectado. Se quedó allí pensándolo un rato, volvió a cerrar la sala, y caminó hasta su casa.

Días después, el evento se repitió, y entonces Martín decidió hacer registro del prodigio mediante una cámara que plantó sobe una mesa, a unos seis metros del retroproyector. Lo que halló al otro día en la cámara fue la causa de su angustiosa búsqueda, la primera pieza del rompecabezas que aún hoy nadie es capaz de completar, a pesar de las incontables pistas, decodificaciones, artefactos de transducción y noticias recolectadas por el grupo de estudiantes al que Martín delegó su búsqueda, incapaz de soportar el círculo vicioso del saber/no saber: “Mi legado es entonces la memoria del desconcierto, la experimentación a ciegas en los recovecos del campus”. “…Lamento, en todo caso, dejarles el angustioso oficio del desciframiento, el agrietado desciframiento detectivesco en ciudades ausentes”, deja dicho MCC en su última carta a los estudiantes que se juntaron en el Salón Cano, entre 2019 y 2020, para descifrar el misterio. He aquí la bitácora errante de aquellos días.

integrantes

Álvaro Enrique Cabrejo Torres

Ana María Aristizabal Bustamante

Ana María Filomena Aristizabal

Andrea Cárdenas

Cristian David Martinez Moreno

Daniel Martín Rincón

Daniela Pinilla Espinosa

Danna Milena Quimbay Galindo

Enrique Rodríguez Araújo

Gustavo Gutiérrez Martínez

Jerson Murillo González

Jhon Sebastián Ríos Cruz

Juan Diego Páez Diaz

Juan Felipe Murillo Unate

Laura Camila Riáno Cabrera

Maira Jimena Ramírez Munóz

Maria Alejandra Alfaro Marenco

María Fernanda Moreno Hoyos

Mario Elías Opazo Cartes

Miguel Ángel Rodriguez Bermúdez

Milena Galindo

Pablo José Caballero Blanco

Paola Andrea Correa Acero

Virginia Cubides Ceballos

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